HUNTER WITH A SCALPEL

 

Título en Coreano: 메스를 든 사냥꾼

Actores: Park Joo Hyun, Park Yong Woo, Kang Hoon, Kim Min Sang

Personajes principales: Seo Se Hyun, Yoon Jo Gyun, Jeong Jeong Hyun, Choi Jong Soo  

Capítulos: 16

Cadena: Disney+

Género: Crimen, suspenso, psicológico

Año transmitido: 2025

Sinopsis: Un thriller psicológico sobre Se Hyun, una científica forense genio que descubre rastros de los asesinatos de su padre mientras realiza una autopsia y se embarca en una cacería para ocultar el pasado que quiere borrar, antes de que la policía descubra primero la verdad.

CONCLUSIONES

Contiene Spoiler

En un principio, este drama no es que no lo quisiera ver, sino que me parecía un poco fuerte por el tema que insinuaba el título. Ella quería ocultar algo relacionado con su padre, y pensé: “Ay no… tratando de ocultar a un asesino”. Pero también hablaba de ocultar su vida pasada, lo que me generó cierta curiosidad.

Decidí ver el primer capítulo “a ver qué tal” y me llevé una gran sorpresa: los capítulos duran entre 20 y 30 minutos, algunos un poco más, pero nada comparado con el formato habitual de una hora. Eso me llamó la atención y me atrapó desde el primer episodio, que apenas duró 22 minutos.

La sinopsis no revela gran cosa. Básicamente, cuando ella era niña tuvo que ayudar a su padre a limpiar sangre y realizar otras tareas relacionadas con los asesinatos que él cometía. ¿Por qué? Porque, según lo que se muestra, la primera persona que su padre mató fue su madre.

Ella presenció todo: el hombre que decía ser su padre se acercaba con clara intención de matarla para no dejar testigos. En un acto desesperado por sobrevivir, la niña tomó un trapo del baño y comenzó a limpiar la sangre alrededor de su madre. Su rostro, en esa versión infantil, era impactante: ninguna emoción, como si hubiera enterrado el miedo y actuara por puro instinto de supervivencia.

Con el tiempo, ella se convirtió en médica forense. Un día, durante una autopsia, encontró algo muy peculiar: un hilo interno que mantenía un paquete dentro del cuerpo. Lo que más llamó su atención fue que la forma de coser coincidía con una característica muy particular de su padre: al terminar, siempre hacía un pequeño moño. Sin que los demás lo notaran, cortó esa parte y comprendió que era obra de él.

Ella creía que estaba muerto, pero ahora sabía que no. Su objetivo era encontrarlo para matarlo, por el terror que le provocaba y para evitar que su pasado saliera a la luz.

Mientras tanto, el detective principal del caso, Jeong Jeong Hyun, comenzó a sospechar de ella. Era extremadamente analítico y notaba los detalles más mínimos. También le llamó la atención un hombre que trabajaba en una lavandería, Yoon Jo Gyun, del que todos hablaban bien, lo que para el detective era aún más sospechoso: “Nadie es tan perfecto, y menos un vecino”.

Sin embargo, las pistas apuntaban hacia la doctora Se Hyun debido a la información que ocultaba. A medida que aparecían más cuerpos, también surgían fotografías de ella de niña y mensajes anónimos que la involucraban en extrañas situaciones.

En un principio, ella solo quería matarlo. Pero todo cambió cuando descubrió que él tenía a una niña a la que obligaba a realizar las mismas tareas que ella hizo en su infancia. Esto la llevó a un objetivo mayor: salvar a esa niña.

Su propio pasado estaba marcado por un trauma similar: cuando era pequeña, su padre cayó por un risco y ella fue encontrada por unas personas que la llevaron a un orfanato manejado por monjas. Allí comenzó a rehacer su vida, pero el daño psicológico ya estaba hecho.

Para colmo, el hombre no solo maltrataba a la niña actual, sino que le dio el mismo nombre que a su hija biológica: Se Hyun. Incluso la vestía con el mismo uniforme. Todo esto demostraba que el asesino estaba obsesionado con “recuperar” a su hija.

El detective Jeong Hyun logró relacionar los asesinatos anteriores con los actuales, algo que otros no veían. Finalmente, se confirmó que Yoon Jo Gyun era el autor. Su modus operandi era tan macabro como constante: cortaba a sus víctimas y luego las cosía, completando el trabajo con un moño.

 Su plan era que, al reencontrar a su hija y siendo ella médica forense, continuara con su “obra” como asesina serial. Un delirio total, propio de un psicópata.

No quiero entrar en más detalles del final, pero sí decir que este drama no solo trata de asesinatos, sino de traumas, secuelas psicológicas y cómo estas marcan a las personas, especialmente a los niños. También muestra la importancia de un buen detective, alguien que hace bien su trabajo y contagia esa ética al resto del equipo.

A pesar de emitirse en Disney Plus, no causó tanto revuelo como otros dramas del género, quizá porque hay muchas historias sobre asesinos seriales. Sin embargo, siento que aquí el tema fue muy bien manejado. La actriz protagonista tiene experiencia en papeles policiales y misteriosos, y aquí brilla con una interpretación impecable.

Se nota el trabajo de todo el elenco, desde el detective hasta la niña, que interpretaron sus personajes con gran realismo. La ambientación y la dirección también están muy bien logradas. Es un drama que atrapa, sobre todo por la historia de la doctora, la niña y la relación retorcida con el asesino.

En definitiva, es un drama interesante, bien elaborado y con un trasfondo psicológico potente. Lo recomiendo tanto a quienes disfrutan del género como a quienes quieren probar algo distinto. Es de esos que, aunque no tengan tanta "fama", merecen ser vistos.

Adicional este drama fue invitada a la sección de exhibición de la 8ª edición del festival de Canneseries, y tuvo su estreno para el público europeo en este.